Actualmente eres Digital Marketing Manager en Silence Urban Ecomobility ¿Qué supone este cambio en tu carrera? ¿Qué te atrae de este nuevo reto?
Un gran cambio profesional y personal. Al acabar el MIM en Esade, mi opción número 1 era trabajar en el extranjero para ganar experiencia personal y profesional. Lo tomaba como un reto 360º. Lo conseguí y estuve casi 3 años en Dublín, Irlanda, trabajando en Google. Google ha sido una gran oportunidad, poder conocer una de las empresas que lideran en tecnología, datos, software, digitalización ha sido una pasada. Sin embargo, desde el inicio de la aventura tuve claro que en algún momento quería migrar a un rol donde pudiera tomar decisiones y tener más impacto sobre el negocio.
¿Cómo has aprendido de la experiencia en una empresa como Google?
De Google me llevo grandes aprendizajes. Por un lado, entender cómo funciona el ecosistema digital y qué ingredientes son claves para generar negocio online: tracking, trazabilidad, análisis de datos, user experience, claridad en objetivos y KPIs, etc. Entender, también, los retos y oportunidades más comunes del entorno online. Y la diferencia entre los retos que tienen las grandes empresas frente a los que tienen pequeñas empresas.
Por otro lado, entender cómo funciona una empresa americana como es Google, no solo a nivel de negocio sino también a nivel cultural, ha sido muy enriquecedor. La importancia que le dan al bienestar del trabajador y la cantidad de iniciativas internas que promueven la diversidad son cosas buenísimas que te llevas solo por trabajar ahí.
¿Cuáles son las ventajas y los inconvenientes de trabajar en una multinacional? Y ¿en una pyme en fase de crecimiento?
Las ventajas de trabajar en Google son, en primer lugar, una gran cultura, más allá de la cultura americana, el compañerismo en Google es extraordinario, todo el mundo se ayuda. En segundo lugar, muy buen equilibrio entre vida laboral y profesional y muy buena remuneración. Y, en tercer lugar, tienes todas las oportunidades del mundo. Siempre he pensado que puedes hacer prácticamente lo que quieras, que pase solo depende de uno mismo.
También existen inconvenientes. Aunque Google tiene procesos de promoción muy buenos, en cualquier gran empresa es más difícil escalar, no es suficiente con dar buenos resultados en tu rol. Además, muchas veces el impacto de tu trabajo es difícil de medir por el tamaño de la empresa. También es difícil tener una perspectiva global de la empresa, pues solo mi equipo de Ventas EMEA éramos alrededor de 2.000 personas. Son tantos equipos y tanta gente que, o sabes moverte muy bien, o entender la estructura es todo un reto.
Aún necesito tiempo para identificar bien ventajas y desventajas de trabajar en una pequeña empresa con alto crecimiento. Pero creo que no nos equivocaríamos mucho si dijéramos que las ventajas y desventajas de una gran empresa son las desventajas y ventajas de una pequeña empresa que crece muy rápido. Las ventajas para mí son las siguientes: hay muchísima más agilidad, las cosas suceden solo si tú las empujas, y existe una visión mucho más amplia del negocio.
“Mi objetivo es asentarme en Silence y arrancar la parte digital de la mejor manera posible. Hay muchísimo recorrido en cuanto a marketing digital, y en este camino creceré yo la primera”
¿Qué objetivos tienes en el medio plazo? ¿Seguir desarrollándote en marketing digital?
No me fijo objetivos muy lejanos, por ahora mi objetivo es asentarme en Silence y arrancar la parte digital de la mejor manera posible, ¡que ya es un gran reto! Hay muchísimo recorrido en cuanto a marketing digital, y en este camino creceré yo la primera, de la mano de Silence. Cuando hayamos conseguido esto, veremos qué viene después.
Estudiaste un MSc In International Management en Esade. ¿Qué ha aportado a tu formación el paso por la escuela?
Para mi Esade fue una experiencia supercompleta, y sería de estas experiencias que suman personal y profesionalmente. A nivel personal, fue toda una pasada poder compartir un año con compañeros internacionales. Al igual que Google, eso te ayuda a abrir la mente y entender un poco mejor el mundo en el que vivimos. En cuanto a la parte profesional, creo que era el complemento perfecto a mi formación previa como ingeniera industrial. Y, sin duda, lo que necesitaba para dar un giro a mi formación. Y no lo digo por hacer un cumplido a la escuela, pero realmente creo que mi entrada en Google no hubiera sido posible sin haber pasado por Esade.
“Creo que mi entrada en Google no hubiera sido posible sin haber pasado por Esade”
¿Cómo te ayudó Esade Alumni cuando decidiste trasladarte a Dublín?
Esade me puso en contacto con ex-Googlers durante las entrevistas, lo cual fue muy útil para ganar conocimiento de la empresa. Una vez en Dublín, me sumé al grupo de alumni de allí, lo cual siempre es útil cuando empiezas en una nueva ciudad.
Formas parte de la junta del Club de Marketing Esade Alumni. ¿Por qué decidiste involucrarte en el club?
Mi tía está en el club desde hace varios años y me animó a unirme. Sabiendo que en algún momento volvería a Barcelona y que quería estar conectada con el mundo del marketing, era una muy buena oportunidad. El punto decisivo fueron los integrantes del club, quienes tienen un perfil más sénior y yo soy aún muy júnior y me queda mucho que aprender, así que pensé que sería el foro perfecto.
¿Qué aporta la red de alumni a los jóvenes y qué podéis aportar vosotros a la comunidad?
Creo que desde Alumni tenemos la oportunidad de estar conectados y seguir aprendiendo. La mayoría de las iniciativas que se generan van enfocadas a temáticas de actualidad, tendencias, etc. Para mí es una fuente más de información y generación de contenido que me permite estar al día con lo que pasa en el mundo. Los jóvenes sin duda podemos aportar nuestra visión más fresca y cercana a las nuevas generaciones, creo que el mix entre jóvenes y séniors puede dar muy buenos resultados. Ellos cuentan con la experiencia y nosotros tenemos más sensibilidad para entender qué quieren o les interesa a las generaciones de hoy.
