La start-up Cooling Photonics ha cerrado su primera ronda de financiación de capital por un importe de 630.000 €. Hablamos con Javier Achiaga (MBA 04), su fundador y CEO, sobre cómo empezó el proyecto y sus planes de futuro.
Cooling Photonics es una start-up que desarrolla tecnologías de enfriamiento sostenibles basadas en la nanotecnología y la tecnología fotónica que evitan o reducen el sobrecalentamiento de cualquier material, lo que evita que el exceso de calor provoque pérdidas de eficiencia en los dispositivos, que estos incrementen su consumo y que se provoquen averías que los inhabiliten. La compañía es una spin-off del Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología (ICN2), fue acelerada en el programa The Collider y financiada por el programa Start-up Capital de ACCIÓ dónde obtuvo la mejor puntuación de la edición.
Ahora, la start-up Cooling Photonics ha cerrado su primera ronda de financiación de capital por un importe de 630.000 €. En esta ronda —en la que se ha producido overfuding— han participado con 568.000 € inversores de la red de business angels de Esade Alumni, Esade BAN, siendo el antiguo alumno de Esade Jordi Cano inversor líder del grupo sindicado. La valoración de la compañía se ha elevado hasta los 3 millones de euros.
Con los fondos obtenidos, la start-up está incrementando el equipo para acelerar la introducción en el mercado de su cinta de disipación térmica y finalizar el desarrollo de un revestimiento que permitirá incrementar la eficiencia de los paneles fotovoltaicos.
-¿Cuál es la apuesta diferencial de Cooling Photonics?
La tecnología de Cooling Photonics permite enfriar de una manera sostenible, sin consumo de energía ni contaminación, simplemente maximizando la capacidad natural del material para desprenderse del exceso de calor y reducir su temperatura. La tecnología consiste en un revestimiento que incrementa las capacidades de enfriamiento del material sobre el que se aplica. Es una tecnología “green tech” que refrigera sin consumo de energía ni contaminación, de manera totalmente pasiva, de forma que tiene un gran potencial de aplicación en sectores tan diversos como la regulación térmica, la generación de energía, la electrónica, la carga eléctrica o la industria aeroespacial, entre otras.
-¿Qué significa para vosotros Esade BAN y cómo os ha ayudado con el proyecto?
Llegamos a Esade BAN gracias al primer Foro de Inversión Seed Deep Tech Barcelona en 2021, cuando todavía la inversión en Deep Tech era algo anecdótico en Barcelona. En Esade BAN encontramos a Fernando Zallo y su equipo, que nos ayudaron desde el principio, consiguiendo que Esade BAN liderase nuestra ronda de inversión. La ventaja de Esade BAN es la diversidad y categoría de sus inversores, lo que facilita el encaje de los proyectos y aporta mucho más valor a las rondas que el simple importe económico. En nuestro caso, Jordi Cano, como lead investor de Esade BAN, se ha implicado en el consejo de la compañía y nos ayuda con su experiencia en el día a día.
-¿Cuáles son los planes de la compañía en el medio plazo?
Actualmente, ya tenemos capacidades de producción y estamos introduciendo nuestra tecnología en el mercado de la regulación térmica, en electrónica de potencia y motores. En el medio plazo queremos escalar nuestras capacidades para crecer en el mercado fotovoltaico, incrementando la eficiencia de los paneles en más de un 6%.
-¿Cuáles han sido los retos más desafiantes hasta la fecha?
Todos nuestros retos hasta la fecha han sido bastante desafiantes. Llevar una tecnología desarrollada en el laboratorio por investigadores al mercado desafía el estado del arte de la tecnología y los medios disponibles. A pesar de todos los inconvenientes que hemos encontrado por el camino, hasta la fecha hemos sido capaces de superar todos los retos que nos hemos propuesto, gracias al esfuerzo del equipo y seguro que a algo de suerte. Entre los más desafiantes en su momento —hoy por suerte entrañables recuerdos—, os podemos comentar el inicio de la fabricación en continuo R2R y la ejecución de los primeros pilotos con clientes.
