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Javier Solana disecciona el nuevo orden mundial en un nuevo encuentro del Top Management Network
El encuentro tuvo lugar en el nuevo Campus de Esade Madrid con la presencia de Javier Solana, presidente de EsadeGeo y ex Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad
Madrid fue el escenario de un nuevo y exclusivo encuentro del Top Management Network de Esade Alumni, una iniciativa diseñada para reunir a antiguos alumnos en posiciones de alta dirección. Con el objetivo de fomentar el debate, compartir retos y transmitir conocimiento en un entorno reducido y relevante, estas comidas-coloquio se consolidan como un espacio de alto valor estratégico.
En esta ocasión, el encuentro tuvo lugar en el nuevo Campus de Esade Madrid con la presencia de Javier Solana, presidente de EsadeGeo y ex Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad. Solana ofreció un profundo análisis sobre la evolución del orden internacional en las últimas dos décadas, destacando el regreso de la competencia entre grandes potencias y la erosión del orden liberal internacional.
Las semillas del conflicto
Solana inició su intervención reflexionando sobre las últimas décadas, un periodo de profunda transformación global. Recordó los grandes acontecimientos del cambio de siglo, como la ampliación hacia el este de la Unión Europea y la OTAN, que fueron celebrados como el triunfo de los valores liberales y del consenso pacífico posguerra fría. Sin embargo, con una visión premonitoria, Solana señaló que "ese momento ya contenía las semillas del conflicto que estamos viviendo hoy", en referencia a las fuertes tensiones geopolíticas que este proceso despertó en Rusia.
A continuación, trazó un recorrido por la guerra global contra el terrorismo, los reveses de las intervenciones occidentales en Oriente Medio y el inexorable regreso de la política de poder duro. Este deterioro culminó con la anexión de Crimea por parte de Rusia en 2014 y, más recientemente, la invasión a gran escala de Ucrania en 2022.
Según advirtió Solana, el deterioro del entorno internacional se ha visto agravado por tensiones internas dentro de las propias democracias liberales. "El terrorismo, el Brexit, el ascenso de China y el auge de las extremas derechas y los populismos han expuesto fracturas profundas", señaló. Mirando al futuro cercano, Solana no ocultó las nuevas incertidumbres que se abren con el regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, lo que podría generar interrogantes sobre el futuro de la OTAN y la solidaridad transatlántica. "Es un mundo muy distinto", sentenció.
La exposición de Solana también abordó el ascenso de China como rival sistémico y el impacto disruptivo de las tecnologías emergentes, especialmente la inteligencia artificial y la ciberseguridad. Estos elementos, según el experto, están configurando un orden global marcado por la volatilidad y la fragmentación, pero a la vez repleto de oportunidades.
El papel estratégico de Europa y el sector privado
En este complejo contexto, Javier Solana defendió con firmeza la necesidad de redefinir el papel de Europa. "Europa no puede permitirse ser un espectador", advirtió. "Debemos ser guardianes de los valores democráticos, pilares de estabilidad internacional y actores estratégicos capaces de hacer política por nosotros mismos". Destacó iniciativas recientes de la UE como señales de una creciente cohesión estratégica, pero también la necesidad de crear "coaliciones de los dispuestos” para aquellos temas que generen más división, recordando que esta fue la forma en la que entró en vigor el euro. Además, insistió en que Europa debe reforzar su poder normativo, apoyando a Ucrania y defendiendo los derechos humanos.
Solana también instó a mirar más allá del Atlántico, subrayando el creciente compromiso de Europa con las democracias de Asia-Pacífico y el renovado acercamiento a América Latina y África.
La parte final de su intervención se centró en el papel emergente del sector privado en la política global. "Las empresas ya no son actores periféricos en la geopolítica: vosotros sois actores centrales", afirmó Solana, dejando claro que, en el entorno actual, la neutralidad no es una opción para el tejido empresarial. "Los líderes empresariales formáis ya parte de la conversación sobre el futuro estratégico de Europa", dijo.
El evento concluyó con un mensaje nítido: Europa debe actuar con unidad, ambición y claridad estratégica. Y debe hacerlo en estrecha coordinación con el sector privado, cuya influencia sobre el equilibrio geopolítico mundial es hoy más determinante que nunca.
Gracias Cristina Vicente Ruiz por la ayuda en la redacción de esta noticia y a Talman Group por patrocinar estas sesiones de Top Management, de gran valor para la comunidad y el talento directivo.
