Pasar al contenido principal

El acceso a la vivienda es teóricamente un derecho garantizado para todo ciudadano en nuestro país. Pero lamentablemente nuestra sociedad no lo concibe así. No lo tenemos interiorizado en el mismo rango de importancia que otros derechos como la sanidad o la educación. Sin embargo, nos afecta o nos afectará a todos de un modo u otro. Incluso a las empresas y a los nuevos emprendimientos.

Bien nosotros, bien nuestros hijos, nuestros amigos, compañeros, socios o colaboradores pueden sufrir las consecuencias de un mercado descontrolado, que expulsa a muchos locales e impide el establecimiento de nuevas unidades familiares o bien negocios o empresas que también requieren de locales comerciales, oficinas y establecimientos.

El alquiler en Barcelona ha alcanzado el precio más alto de la historia

 

La vivienda en Barcelona en datos

 

Y si esta situación es flagrante para todos, especialmente dura para las personas con más dificultades económicas. Las entidades sociales se vieron forzadas a trabajar en este frente de forma coordinada, como bloque lobby. Así surge la plataforma Hàbitat3, fundación que nace en 2014 impulsada desde la Taula del tercer sector, con la finalidad de dar respuesta al problema de la vivienda en personas en situación de vulnerabilidad. Pretende ser “la inmobiliaria del tercer sector” y poder ofrecer a los colectivos más necesitados pisos a un precio más controlado que lo que el mercado impone. Cierto que algunos bancos han puesto a disposición algunos de sus pisos desocupados. Pero muchos de estos pisos requieren rehabilitación o adecuación o peor aún, están ocupados. Así pues, la gestión para que se destinen finalmente a uso social es igualmente imprescindible.

Habitat3 trabaja desde una perspectiva completa. Es decir, ofrecer una solución que va más allá de proporcionar una vivienda. A través de ONGs y ayuntamientos también realiza la gestión y el seguimiento de las personas a las que da alojamiento. Por su situación de riesgo requieren un acompañamiento especial, soporte integral en todas las disciplinas que resulta clave para el éxito del modelo.

En 2015, un grupo de antiguos alumnos de ESADE llevaron a cabo una asesoría para esta organización, que tenía como foco el modelo financiero y de sostenibilidad de la misma. La entidad actualmente ya gestiona un total de 380 Pisos de los cuales 17 son de su propiedad. De estos pisos, 80% son cesión de particulares, que los prestan a Habitat3 durante 3 años, a cambio de un precio de alquiler un poco más bajo que el de mercado pero garantizo al 100% y durante todo el tiempo del contrato. Así los propietarios aseguran 100% de ocupación y evitan los problemas derivados de cambios de inquilino, periodos de arreglos, cambios de titularidad de suministros… Es un modelo de éxito, con ratios de renovación elevados que además contribuye a la dispersión geográfica de los pisos a precios sociales, lo que contribuye a paliar la temida generación de guetos.

Tras la crisis, se ha evidenciado que, en ciertas circunstancias, todos podemos acabar sufriendo este problema. No es algo tan descabellado, los trabajos fijos son cada vez más inusuales, la posibilidad de perder el empleo o que el negocio no funcione existe. Las capacidades requeridas cambian muy rápidamente y reciclarse es complejo. Cualquiera puede quedar fuera del sistema por muy lejos que perciba hoy por hoy esta posibilidad. Los sustentos sociales de familia y amigos son cada vez más frágiles en contextos de individualismo y perdida de redes. Y en cualquier caso, lo que está claro es que todos queremos vivir en poblaciones acogedoras y cuidadas, integradoras y cívicas. Todos queremos visualizar en nuestras calles la cohesión social. Sin guetos, sin pobreza y sin personas viviendo en la calle.

¿Como contribuir a solucionar el notable problema de acceso a la vivienda?

Como ciudadanos podemos exigir a los ayuntamientos políticas de aumento del parque social de alquiler así como que destinen mucho más dinero a políticas de vivienda. También promoción y ayuda a la rehabilitación, muy importantes para que los centros de las ciudades no se deterioren y se sumen a la oferta de alquiler. Como inversores, existen algunas alternativas muy serias de Constitución de Fondos de inversión destinados a la vivienda social que dan rentabilidades superiores a los depósitos bancarios. Vía RSC, podemos contemplar los proyectos que tienen que ver con vivienda como prioritarios. Con inversiones pequeñas se crean muchos nuevos hogares.

Las entidades sociales necesitan colaboración de empresas y donaciones en especie para la construcción y rehabilitación. Desde la empresa además se pueden organizar a través del voluntariado corporativo acciones de compromiso por ejemplo adecuando pisos. Si somos propietarios podemos ceder la gestión de pisos de alquiler a entidades como Habitat3, que también está abierta a cualquier tipo de donación desinteresada por parte de empresas las que estén dispuestas a contribuir para que la fundación siga desarrollando su actividad en el marco de actuación. A título individual, también tienen la posibilidad de colaborar haciéndose socios de ONGs como Arrels fundació, Habitat3, CáritasFundació MambreFundació Provivienda