Con una experiencia profesional de más de 20 años en diversas organizaciones, Javier Albouy es un abogado con gran capacidad técnica en derecho IT y ciberseguridad y amplias habilidades comerciales. Estudió en Esade la licenciatura y dos másteres. Pero su trayectoria cuenta con un esfuerzo de superación añadido, ya que es una persona con ceguera. Hablamos con él sobre sus experiencias y aprendizajes vitales.
- ¿En qué momento decidiste que querías ir a la universidad para estudiar derecho?
Tomé esta decisión a los 18 años cuando, tras haberme quedado ciego debido a un cáncer en la zona de los nervios ópticos que requirió radioterapia, constaté que no podía cursar estudios universitarios como ADE o ingeniería industrial, que a mí me gustaban mucho. Además, mis padres me asesoraron sobre las ventajas que tendría el hecho de estudiar derecho de cara a mi futuro profesional.
- ¿Qué retos supuso para ti estudiar la licenciatura de derecho y posteriormente el Máster de Derecho de Tecnologías de la Información?
Para mí, el principal reto fue estudiar usando otros medios diferentes a la escritura en papel, como había hecho desde pequeño, y aprender muy rápidamente a usar tecnologías de informática y comunicación. También fue un desafío para mí explicar a los profesores cómo podían concretar mejor su explicación, que iban complementando con la pizarra (por ejemplo, en asignaturas como contabilidad o finanzas y otras en las que la explicación se basaba mucho en esquemas o dibujos en la pizarra).
- ¿Por qué escogiste Esade y qué significa para ti? ¿Cómo valoras contar con una comunidad como Esade Alumni?
Escogí Esade por su prestigio institucional como entidad universitaria y estando convencido de la calidad de los contenidos de estudio y de la calidad del profesorado. Para mí, Esade es una referencia en mi vida y formar parte de Esade Alumni implica seguir conectado con la misma y con sus antiguos alumnos y abrir nuevas oportunidades de futuro.
- ¿Qué han supuesto las innovaciones tecnológicas en tu vida diaria (como herramientas de soporte)?
Han sido un elemento clave para estudiar, para trabajar y también en mi vida privada o de ocio. Admiro la sensibilidad de empresas como Apple, que ha concentrado grandes esfuerzos para garantizar la plena accesibilidad de sus productos tecnológicos; desde hace 14 años uso a pleno rendimiento un iPhone que he ido renovando sucesivamente en sus versiones y que me permite su uso sin barreras con el software de voz Voice Over, y también, desde hace 6 años, uso un Apple Watch.
- ¿De dónde nace tu capacidad de superación?
Principalmente, nace de mi profunda fe cristiana, de mi confianza infinita en Dios y, además, creo que es un don o talento que Dios me ha dado, y yo he puesto en marcha y lo he ido desarrollando.
- ¿Qué destacarías de tu trayectoria profesional hasta ahora y con qué tipo de proyectos te identificas?
Humildemente, pienso que el hecho a destacar sería que tengo un perfil muy polivalente, intento potenciar mis conocimientos y competencias o habilidades. Me gusta trabajar en nuevos proyectos que impliquen retos. También destacaría mi gran capacidad de concentración trabajando. Me gustaría trabajar en una empresa que tenga sensibilidad y apueste decididamente por la diversidad de personas e inclusión en su organización.
- ¿Qué sueños te quedan por cumplir y cómo te gustaría que fueran los siguientes años (profesionalmente hablando)?
Un sueño para mí es que las nuevas tecnologías, aplicadas en el ámbito de la medicina, consigan que personas como yo podamos recuperar nuestra capacidad visual (por ejemplo, en Alemania se están desarrollando unas gafas biónicas que a personas con discapacidad visual les permiten poder volver a ver en blanco y negro). Por supuesto, que ello sea extensible a personas con otros tipos de discapacidad física o sensorial.
"Un sueño para mí es que las nuevas tecnologías, aplicadas en el ámbito de la medicina, consigan que personas como yo podamos recuperar nuestra capacidad visual"
- ¿Crees que las empresas son inclusivas con las personas con discapacidad?
Creo que nuestra cultura está muy lejos de la de los países anglosajones, que tienen mucho más interiorizado el pensamiento de que cada persona tiene capacidades diversas. Mi experiencia profesional durante los últimos 24 años me ha demostrado que, por el hecho de ser ciego, las personas te etiquetan y piensan que quizás no tienes las capacidades óptimas para trabajar a pleno rendimiento.
- ¿Cómo piensas que podemos avanzar en inclusión?
Creo que la clave es ir organizando talleres o formaciones sobre diversidad e inclusión, que incluyan actividades indoor y outdoor y que permitan eliminar los estereotipos o etiquetas que las personas tienen cuando deben trabajar en equipo con una persona con discapacidad física, sensorial o psíquica. El año pasado, en el mes de julio, en Esade organizamos un taller de este tipo.
- ¿Cuál sería tu recomendación para otras personas con dificultades? ¿Qué sientes al pensar que tu experiencia puede inspirar a otras personas?
Mi recomendación es que, cuando se incorporen en un nuevo proyecto profesional o empresa, dediquen un tiempo importante para conversar con su director de equipo o departamento y con el resto de los miembros del equipo a fin de conocer en detalle sus capacidades y qué tecnologías informáticas y de comunicación usan para poder trabajar a pleno rendimiento. De esta forma conseguirá que sus compañeros de equipo confíen en él o ella y eliminen o no generen etiquetas sobre él o ella.
